Sapo corredor epidalea calamita
Anfibio anuro de la familia Bufonidae y única especie del género monotípico Epidalea siendo uno de los anfibios más comunes en la Península Ibérica. Su hábitat es muy variado, pudiendo adaptarse a entornos secos, con disponibilidad de al menos una lámina de agua, tipo charca o balsa, para su época de reproducción. Es un anfibio que se encuentra fácilmente en todo el territorio de Navarra, aunque es especialmente visible en las zonas húmedas de ríos, sotos y/o embalses.
Se diferencian dos fases durante su vida. Cuando son renacuajos y cuando son adultos. Cuando nacen los renacuajos miden unos 0,35 cm, alcanzando los 3 cm al final de su desarrollo. Tras la metamorfosis su longitud disminuye hasta los 1,3 cm, momento en el que abandonan el agua. En su etapa adulta pueden llegar hasta los 6 cm.
Se distingue del sapo común por una línea amarilla o verde claro longitudinal en la mitad de la espalda. Cuerpo rechoncho y muy verrugoso; glándulas parotídeas paralelas. Tienen patas relativamente largas que le dan su distintivo andar en contraste con los movimientos de salto de muchas otras especies de sapos.
En episodios de lluvia, los machos acuden a las charcas con rapidez y en muy poco tiempo (un par de días) pueden formarse grandes coros de machos cantando. Los coros alcanzan el pico de actividad de 2 a 3 horas tras la puesta de sol y se alargan hasta 2 – 3 horas antes de amanecer, en función de las condiciones ambientales (temperatura y velocidad del viento) y el tamaño del coro.
Curiosidad aparte, es la interacción entre especies, la cual experimenta una cierta competencia con la subespecie Bufo bufo y Rana temporaria, las cuales Epidalea calamita experimenta también en ocasiones la competencia interespecífica con, frente a los cuales se encuentra en desventaja competitiva en parte debido a efectos de prioridad debido a la fenología reproductiva de estas especies.